El poder queda en familia: Meritocracia Disfrazada

A raíz de lo que sucedió en la Municipalidad de San Ramón, donde cuatro funcionarios contratados por el municipio entre el 1 de enero de 2014 y el 31 de julio de 2019 tenían vínculos de parentesco con directivos, jefes de departamento o concejales, lo que contraviene lo dispuesto en la ley orgánica de municipalidades, nos lleva a reflexionar en estos dos conceptos: Nepotismo y Meritocracia.

La RAE define al nepotismo como “preferencia desmedida que algunos dan a sus parientes para las concesiones o empleos públicos”, sin importar el mérito que tenga para ocupar algún cargo en el estado.

Por otro lado, cuando nos referimos a la meritocracia, es un proceso de asignación de cargos públicos, en el que predominan los méritos de los candidatos que postulan al cargo y no la influencia o los contactos que tengan para favorecer una postulación a un cargo público.

Si bien la ley prohíbe a las autoridades públicas -incluyendo a los parlamentarios- contratar a parientes, la misma norma establece que se pueden establecer vínculos comerciales de ese tipo “cuando circunstancias excepcionales lo hagan necesario”. En ese caso, la contratación debe hacerse mediante una “resolución fundada” autorizada, en el caso de la Cámara por la Comisión de Conducta Parlamentaria, usando la nueva Ley de Transparencia.

Un actor político mencionaba que cuando se quiere generar en la ciudadanía mayor confianza, el mundo político debe ser capaz de renunciar a muchos privilegios. Y entre ellos es que sea el mérito y esfuerzo, el que determine quienes entran y quienes no entran al Estado. Este debiera ser un deber moral, porque finalmente el Estado es justamente la herramienta que tenemos para construir una sociedad más justa.

La meritocracia es usada con éxito en las gestiones públicas más eficientes del mundo. El objetivo de la meritocracia es garantizar la igualdad en el acceso a cargos públicos para elevar la calidad de los servicios que el Estado brinda a los ciudadanos e incentivar el crecimiento personal y profesional de los trabajadores en dicha administración.

Fuentes:

Fuente: Unidos por Chile – Sábado 17 de octubre de 2020