Por Alejandro Lolas Chaban. 

 

Los roles de la sociedad chilena en tiempos de pandemia

Estos días me han permitido reflexionar acerca de nuestra sociedad y me he percatado que uno de los mayores problemas que tenemos como sociedad es la emergencia de grupos que han asumido roles para los cuales no tienen ninguna competencia.

Los periodistas y medios de comunicación, han asumido el rol de los defensores de la moral y justicia, creen ser expertos en Salud Pública, Epidemiología, Economía y en todas las materias imaginables. Están impregnados de las ideas trasnochadas del socialismo, el resentimiento y la lucha de clases.

Los dirigentes de las organizaciones de trabajadores y algunos profesionales, elegidos por una minoría de electores, dictan cátedras de moral y resentimiento. Una “nueva juventud” que disfruta de todos los beneficios del capitalismo, pero reniegan de él. Un gran número de ciudadanos que solo esperan que el “Estado les DÉ”, pero ellos no quieren aportar al Estado.

Estos ciudadanos “ejemplares” son aquellos que apoyan o destruyen los supermercados, farmacias, fábricas, municipalidades, al grito de “muerte al capital”, “muerte a Chile y Viva el Pueblo Mapuche”, “que muera el Roto Quezada” y “P*%# pal que lee”, son aclamados y vitoreados como héroes por los jóvenes, políticos de izquierda y periodistas. Pero cuando sus familias, amigos y ellos mismos necesitan ayuda, recurren a ese “Estado Opresor”, a los hospitales y clínicas, a Carabineros y Fuerzas Armadas, a los Municipios, a los supermercados y fábricas.

Reclaman contra los empresarios, pero la ayuda que reciben es de estos empresarios abusadores, ignorando que el ESTADO no genera ingresos, solo recauda de esos privados para repartir a los más necesitados.

Aplaudieron la rebelión y destrucción de Chile desde octubre y hoy reclaman por todo. Asustados por la cesantía que llegó, piden a esos empresarios que mantengan las fuentes laborales que intentaron con tanta insistencia destruir.

Respecto al Ministro de Salud, Dr. Jaime Mañalich, sus subsecretarios y grupo asesor, no pueden reconocer que lo han hecho bien, que ha sido un gran Ministro, escudriñando en cada detalle para encontrar alguna falla, aunque sea un detalle ínfimo. Respecto a los ventiladores mecánicos, han repetido majaderamente las mismas preguntas, habiendo explicado el Ministro que es un tema que debe mantenerse con la mayor discreción y secreto. Penoso ha sido el espectáculo brindado por los alcaldes de todo el espectro político, que subyugados por su egocentrismo, pululan a diario en los canales de televisión haciendo alarde de sus incipientes conocimientos acerca de esta nueva pandemia, intentan dar cátedra a los expertos.

Al respecto cabe preguntarse ¿dónde están aquellos políticos, dirigentes, intelectuales o ciudadanos que anteponiendo a sus legítimos intereses, piensen en nuestra patria y sus palabras reflejen su pensamiento y no sean producto del resultado de las encuestas?. Probablemente no están por el temor a ser humillados o aniquilados por una masa de internautas anónimos, ignorantes y cobardes.

Respecto a los que, a estas alturas de la historia siguen pregonando la “lucha de clases”, solo lo puedo entender desde distintos puntos de vista (y no es broma), o tienen una depresión endógena o exógena por falta de afecto en su infancia o tuvieron muchas necesidades, lo que les creó un resentimiento hacia aquellos que disponían de recursos. Otros buscan en el prójimo a los culpables de sus fracasos, ya que es más fácil y llevadero, no culparse a sí mismo o a sus padres, sino que culpar a la sociedad. Algunos siguen esa senda solo por simple y pura ignorancia, mientras están aquellos que siguen las modas porque ser de izquierda y contestatario esta de MODA. También existen los que obtienen alguna ganancia o viven gracias a sus cargos de dirigentes y políticos, usando la ideología para ocultar negocios ilícitos. Otros quizás como una inadecuada respuesta a las injusticias que padece nuestra sociedad.

Ahora, para ser justo también, en el sector que aboga por el Capitalismo y Libertad, existen muchos que creen que el “mercado’ regula todo, con lo que no estoy de acuerdo, ya que el mercado no tiene conciencia ni moral, por lo que el Estado debe velar por una real libre competencia y tener los mecanismos para recaudar los impuestos necesarios para el buen funcionamiento del país.

En este grupo hay algunos que se sienten “superiores”, y tratan al resto con insensibilidad y en ocasiones con desprecio. Algunos creen que la finalidad de su existencia es acumular riqueza material y se pavonean de aquello, y hay quienes no miran a los “otros”, pues pareciera ser que son invisibles o transparentes a sus ojos.

Durante el período de gobiernos democráticos, se privatizó y entregó a empresas nacionales y multinacionales áreas de la economía que a mi parecer debieron mantenerse en poder del estado, aunque esto es discutible, lo que no es debatible son los contratos mal elaborados.

El odio y la promoción de la añeja “lucha de clases”, genera en los contrarios (derechistas) una reacción de defensa y a la vez siembra en los corazones de toda la nación, rencor y violencia, lo que no conduce a nada beneficioso.

Hoy debemos volver a ser un solo país, aislando a los extremistas y a los promotores de la violencia. Nuestra Patria nos necesita a todos “de Capitán a Paje”, para sortear las tempestades y arribar a buen puerto.


Fuente: Unidos por Chile – Domingo 26 de Abril 2020